Son muchas las calas y playas secretas de Ibiza por descubrir en esta isla maravillosa, aunque muchas de ellas son desconocidas para el gran público; pero sin duda son el rincón perfecto para pasar un estupendo rato alquilando un barco sin licencia en Ibiza y disfrutando de lugares paradisíacos.

Y es que aunque algunas de las mejores playas de España se encuentran en las Islas Baleares y más concretamente en Ibiza; pero precisamente debido a la fama que tienen suelen estar abarrotadas de turistas y bañistas, especialmente en los meses de verano. Por tanto, si quieres disfrutar del sol, la playa y las aguas turquesa del Mediterráneo sin agobios, lo mejor es buscar esas calas y playas escondidas en Ibiza que aún es posible encontrar. ¿Nos guardas el secreto?

Cala d’Hort (Atlantis)

Este lugar fue apodado como Cala Atlantis por los turistas debido a sus extrañas formaciones rocosas que la han convertido en un lugar casi mágico. Antaño una cantera, su nombre real es Sa Pedrera de Cala d’Hort, y desde los años 60 este ha sido un lugar de culto hippie, que ha dejado su impronta en figuras e imágenes de budas en la roca. Es también un lugar donde se suele practicar el nudismo. Eso sí, es un lugar más concurrido que otras calas “secretas” de Ibiza.

Los extraños cortes en la roca de Atlantis se llenan además de agua, creando bellas piscinas naturales de color verdoso y agua calentada por el sol. Es también un lugar ideal para bucear por sus aguas cristalinas, pero ojo con las medusas. Para llegar debemos seguir la ruta entre Es Cubells y Cala d’Hort, y girar a medio camino cuando veamos asomar la cima de Es Vedrà (la Torre del Pirata). Desde allí hay un camino para bajar a pie, corto pero también muy duro.

Sa Figuera Borda

Posiblemente una de las calas de Ibiza más originales de toda la isla, Sa Figuera Borda se encuentra en la costa oeste no lejos de Platges d’en Comte, y destaca por estar a los pies de un arco natural de piedra formado en la roca donde los pescadores construyeron sus casetas, y también unas empinadas escaleras que sirven para llegar hasta el lugar y darse un baño.

El acceso no es sencillo y el camino no está señalizado, por eso este lugar no es muy frecuentado y es una zona casi virgen. Aquí se puede contemplar uno de los mejores atardeceres de Ibiza, especialmente en verano, cuando el sol se pone en el mar junto al islote de s’Espartar. El fondo es rocoso así que recomendamos usar zapatos de goma.

Cala Aubarca

Conocida también como Cala d’Albarca o d’Albarcar, y situada a unos 3 km del pueblo de Sant Mateu, Cala Aubarca es una cala aislada y habitualmente solitaria que está rodeada de grandes bosques de pino e impresionantes acantilados en el que es uno de los paisajes más vírgenes de toda Ibiza, aunque es famosa sobre todo por su bonito arco de piedra, una especie de puente creado por la naturaleza.

Aunque las aguas de Cala Aubarca son de un azul intenso y perfectas para bucear, la playa está llena de rocas grandes por lo que no es el mejor lugar para tumbarse al sol. El camino hasta aquí no es fácil y el lugar está muy aislado, pero a cambio disfrutaremos de una playa prácticamente para nosotros solos y de la naturaleza en estado virgen.

Cala Llentrisca

Con unos 100 metros de largo y 10 de ancho, Cala Llentrisca es posiblemente una de las calas más solitarias y vírgenes de Ibiza, salvo por la presencia de las típicas casetas de pescadores. Esta playa de cantos rodados recibe su nombre del Cap Llentrisca, un cabo situado junto a la impresionante Isla de Es Vedrà.

El aislamiento de la que es una de las playas más secretas de Ibiza se debe a que está apartada de los lugares turísticos y a la dificultad del acceso: debemos llegar a la Urbanización Los Parques de Es Cubells y desde ahí recorrer a pie un largo sendero de casi 1 km. No obstante el lugar lo merece, y es uno de los mejores lugares para ver fondos marinos.

Es Portitxol

Es Portitxol (literalmente “El Puertecito”) es ese típico lugar paradisíaco que ves en la publicidad sobre unas vacaciones en Ibiza, pero que luego no sabes dónde encontrar… ¡Pues aquí! Se trata de una pequeña ensenada natural de aguas cristalinas -perfectas para bucear con snorkel– situada no lejos de la Cueva de la Luz, en un entorno natural precioso.

Como suele ocurrir, llegar a este lugar privilegiado -salvo que vayamos en barco- no es fácil; desde la Urbanización Isla Blanca -donde dejaremos el coche- hay que caminar una media hora por un sendero con bonitas vistas. Como otras calas vírgenes de la isla no tiene arena, sino cantos rodados; pero sin duda es una de las mejores calas secretas de Ibiza.

Es Canaret

Es Canaret es una pequeña joya semi escondida en la costa norte de Ibiza, con fondos marinos que poseen una gran biodiversidad, ideales por tanto para bucear. Antaño cubierta por bosques de pinos, la zona fue arrasada en 2010 por un terrible incendio que obligó a evacuar a cientos de personas por mar.

Para llegar hasta aquí tenemos que dirigirnos a Portinatx y girar por la vía que conduce a Es Caló de S’Illa. Curiosamente el único acceso es cruzando un sendero que atraviesa los terrenos privados de una gran casa; sin embargo este camino es de uso público, como lo es la playa (todas las de Ibiza lo son, de hecho), así que puedes recorrerlo sin problema para acceder a la cala y disfrutar del lugar.

Cala Blanca

Cala Blanca es una hermosa playa en estado casi salvaje situada al este de la isla, entre Cala Llonga y Santa Eulalia; rodeada de pinares y montañas, destaca por su estrechez y por estar llena de piedras -incluso grandes rocas desprendidas del acantilado- aunque el lugar es hermoso y con aguas cristalinas.

A pesar de tener más de 100 metros de extensión, prácticamente es una desconocida. ¿El motivo? El complicado acceso. Sólo se puede acceder a través de un túnel de unos 100 metros que atraviesa una montaña, reliquia de unas obras que nunca se completaron, y no es aconsejable ir solo. No obstante, el paisaje y las vistas merecen la pena.

Ses Balandres

Ses Balandres es sin duda una de las calas más espectaculares de Ibiza, pero también una de las más inaccesibles y aisladas. Ubicada a un kilómetro del pueblo de Santa Agnés de Corona, como muchas calas aisladas de Ibiza la ruta de acceso es tan espectacular como la cala en sí; esta tiene unos 250 metros de largo pero sólo 10 de ancho, por lo que al estar abierta al mar sólo se puede acceder a ella con buen tiempo.

El camino hasta la cala nos llevará unos 30-40 minutos y debemos estar en forma, ya que en muchos tramos es necesario agarrarse y bajar o subir por cuerdas; igualmente debemos llevar calzado adecuado, agua y comida. A cambio veremos paisajes increíbles, restos de construcciones típicas, fondos marinos de ensueño e impresionantes acantilados.

Canal de s’Olla

Canal de s’Olla se conoce también como Cala Llarga o Cala Jach, y aunque está dentro del Parque Natural de Ses Salines en un paraje intacto de bosques de pino e impresionantes acantilados, curiosamente está al lado de la Playa de las Salinas, una de las más turísticas de Ibiza.

Para llegar a la que es la playa más meridional de Ibiza partiremos desde Las Salinas acercándonos al pueblo de Sa Canal; desde allí seguiremos unos 20 minutos por un sendero que bordea el mar para luego subir un monte, y descender finalmente hasta Canal de s’Olla.

Es Caló de s’Illa

Situada no lejos de la Illa d’en Calders, una pequeña isla deshabitada en forma de “C” a pocos metros de la costa, Es Caló de s’Illa es una pequeña y bucólica playa de apenas 30 metros, pero muy pintoresca: con fondos marinos rocosos y situada frente a un arrecife.

Apenas concurrida por la dificultad del acceso, para llegar debemos seguir el torrente que desemboca en la cala. Está totalmente aislada, así que debes llevar todo lo que necesites.

Playa del racó de ses Dones

Situada justo entre el monolito natural de Es Paller d’en Camp y la playa de Aigües Blanques, la Playa del racó de ses Dones es una pequeña cala con unos 20 metros de arena llamada así porque hasta mediados del siglo XX era usada solo por las mujeres.

El curioso acceso se realiza a través de un agujero en la roca que antaño se hizo junto al monolito de Es Paller d’en Camp para que las mujeres pudieran entrar desde la playa del Racó des Paller d’en Camp, situada justo al lado. No es fácil, y por eso suele estar vacía.

Na Coloms (La Cueva de la Luz)

Na Coloms, conocida también como Ullal de na Coloms o Avenc de na Coloms, el apodo de “La Cueva de la Luz” se lo han dado muchos submarinistas. Es una cueva que se inunda a través de un túnel subacuático por el que penetran al mediodía los rayos del sol iluminando el interior de esta piscina natural.

Es un lugar tan espectacular como peligroso: el camino es largo (1-2 horas), duro y muy complicado, y solo buceadores expertos con equipo pueden bañarse en la cueva, de la que sólo se puede salir buceando. Bañarse es muy peligroso y ya han muerto personas ahogadas.

Cala Embarcadero (Ses Xorollanes)

Can Embarcadero no es exactamente una playa, sino un antiguo embarcadero antaño llamado Ses Xorollanes; pero es un lugar perfecto para tumbarte al sol, bañarte y descansar, es de fácil acceso, y apenas es visitado. Está a los pies de una enorme mansión donde se alojaron Elle McPherson o Naomi Campbell.

Se puede ir andando 5-10 minutos a lo largo de la costa desde Platges de Comte, una de las mejores playas de Ibiza. Los dueños de la mansión han construido unas escaleras pero el lugar es de dominio público, así que puedes bañarte sin problema.

Es Codolar

Es Codolar podría ser una de las playas más concurridas de la isla si no fuera por los còdols (grandes cantos rodados que la cubren por entero, incluso bajo el agua) y por estar junto al aeropuerto de Ibiza: los aviones pasan muy cerca, aunque es un lugar ideal para fotografiarlos.

Es un lugar bastante solitario a solo 10 km de la ciudad de Ibiza y junto a las Salinas con apenas turistas, a pesar de que la playa es inmensa y el paisaje es realmente bonito.

Caló Gros (Punta Grossa)

Cala Gros es una de las calas más aisladas de Ibiza. Ubicada a los pies del antiguo faro de Punta Grossa, está prácticamente virgen y sus aguas son cristalinas.

La dificultad es que el acceso solo se puede realizar por barco -y únicamente en días de buena mar- ya que el descenso por el acantilado es muy peligroso y no hay camino. Es una buena excusa para alquilar una embarcación, ¿verdad?

 

No ha sido fácil hacer un compendio de las calas y playas secretas de Ibiza; esta isla tiene muchos rincones paradisíacos y escondidos, y al hablar de ellos… Dejan de ser secretos. Por eso, si decides acudir a estos lugares, recuerda hacerlo con cuidado y respeto para que sigan siendo lo que parecen: pequeños paraísos en la Tierra.